URGENTE: Plataforma de lucha que resuma las reivindicaciones de todos los sectores
Alertan sobre estrategia de Maduro y la cúpula corrupta del PSUV; la cual consiste en radicalizar el conflicto político para distraer y profundizar paquetazo económico. Es urgente tener una plataforma de lucha que recoja el sentir y necesidades de los diversos sectores del país y así lograr la acumulación de fuerza y la elevación de la conciencia política del pueblo, entre otras cosas que deben estar contempladas en una estrategia de los sectores que luchamos por el cambio.
Los que ven al pueblo como un instrumento para el logro de los objetivos de determinado grupo, se colocan consciente e inconscientemente en una posición reaccionaria y ajena a los intereses populares; puesto que el pueblo y sus intereses deben ser la razón de la lucha. Esta conducta motiva dudas y hasta resquemores en los sectores populares que representan la mayoría de nuestro país; sobre todo cuando tenemos la experiencia del Carmonazo, donde se evidenció que los que asumieron el poder solo velaban por sus intereses y quedó claro su sed de poder y no un proyecto que encarnará los cambios deseados por la población. Por lo tanto es equivocado desarrollar la lucha con un simple VETE YA puesto que no aborda los aspectos económicos y sociales que afectan a la mayoría.
Otro grave error estratégico es asumir posiciones radicales como ha sucedido en otras ocasiones; donde hay quienes creen y le hacen creer a su entorno que estamos en la ultima etapa de la lucha y que las acciones que asumamos en los próximos días nos darán un cambio de gobierno. Sin valorar la necesaria acumulación de fuerza que implica una política que involucre a los diversos sectores del país a la vez de aislar y debilitar al régimen que se este enfrentando.
No podemos dejar de señalar las pugnas existentes entre algunos dirigentes nacionales por la candidatura presidencial, donde la sensación de división en el movimiento opositor es algo evidente y que al final de cuenta termina significando un factor a favor de Maduro y de la cúpula gobernante que trata con la polarización y radicalizar, en aras de endurecer a la masa que aun no ve en el movimiento opositor una alternativa de cambio y que mas bien los observa como unos borrachos peleándose por una botella vacía, puesto que no la posibilidad de una nueva elección presidencial no esta clara aun.
No debemos para de luchar, pero debemos debatir sobre la crisis causada por el desgastado modelo económico monoproductor, rentista y dependiente, unida a la asquerosa corrupción de la cúpula gobernante y de una BOLIBURGUESIA que ha logrado un gran poder económico gracias al incremento de la dependencia de nuestro país a la importación; a los millonarios negocios petroleros junto a sus socios, las poderosas transnacionales que controlan el mercado energético en el planeta; los contratos con el Estado y el perverso negocio de la especulación financiera.
Dicha crisis motiva al igual que antes, a la aplicación de un paquete de medidas económicas donde en los trabajadores, la clase media y en el pueblo recae el peso de la misma. Paquete que contempla devaluaciones graduales, aumento de la gasolina, desconocimiento de derechos laborales y contractuales, mayor endeudamiento del país, entre otras medidas que llevan el complemento de la aplicación de mecanismo represivos y limitantes de los derechos de los trabajadores y el pueblo. Todo esto amerita un debate y una posición sobre el rumbo del país. De otra manera podremos sacar del poder a Maduro y a su camarilla, pero de no existir un cambio real y sustancial en la atención de las causas de los problemas económicos y sociales del país (donde la corrupción es uno de los elementos de las crisis) tendremos un conflicto de grandes dimensiones.
CONCLUSIÓN: Los cambios reales pasan por una plataforma de lucha que una a todos los sectores y por una propuesta de país donde la crisis y sus causas sean atacadas de raíz; de otra manera, hoy sera Maduro y mañana serán otros los que tendrán un conflicto de masas cada vez mayor en cantidad y dimensiones.
